jueves, 29 de enero de 2009

Abreviaturas..


Esta noche es distinta, me siento mucho más vulnerable, mucho más humano, mucho más mortal, que de costumbre. Esta noche no es normal.
Esta noche me la voy a regalar, me la voy a regalar y la voy a disfrutar. 
Esta noche reiré, lloraré y viviré todas esas cosas que me quedaron por vivir.
Lucharé sin parar contra el tiempo, daría todo lo que fuera por detener ese segundero que sigue avanzando, que me sigue derrotando una y otra vez, que nunca me deja ganar.
Esta noche soñaré todo lo que no he soñado, seré lo que nunca he sido y siempre he querido ser.
Voy a jugar a ser un superhéroe cualquiera, un tipo ideal, un hombre educado, alguien capaz de hacer una buena amistad, un marido ejemplar.
Intentaré cambiar el mundo, terminar con la pobreza, ver a los humanos progresar.
Voy a crear un mundo para dos, voy a planear mi familia y voy a procurar seguir siendo yo.
Me iré de viaje a "Nunca Jamás", me compraré un año de felicidad incondicional y buscaré alguna persona para amar.
Gritaré todas esas groserías que he tenido que callar para no incomodar, correré desnudo por el pabellón de los modales y las buenas costumbres, seré eso que siempre he querido ser. 

Un loco.

Cierto, he vivido un par de cosas y tengo otro par por vivir, pero siento que esta noche es distinta. Es como una de las últimas oportunidades que me van quedando para ser realmente yo, sin tapujos ni caretas, sin pertenecer a ninguna institución, ni pelear por un pedazo de pan. Ser yo, sin más, lleno de miedos y palabras confusas e inmaduras.
No me preocuparé de más, no voy a dejarme pisotear ni tengo ganas de callar.
¿Por qué?, porque soy un loco que se enorgullece de su estado mental.
¿Qué importa mi edad?, son números nada más.

Y sigo igual, pase lo que pase, sigo igual. 
Impulsivo y desconfiado, con buenas intenciones, pero algo tosco en la manera de ayudar. 
Apasionado por la música y con un humor poco soportable.
Soberbio y terco, rodeado de gente excepcional, caminando con un rumbo que nadie nunca entenderá.
Inconformista, siempre pido un poco más. 
Juguetón y baboso, con los ojos caídos, cual cocker en plena libertad.
Llevado a mis ideas, un soñador por naturaleza, un hijo ilustre de la utopía, esa que pocas veces se hace realidad.
Con un miedo enorme a fallar, a no hacer mis sueños realidad, a no ser eso que una vez pensé como mi futuro ideal.

Y me estoy levantando del suelo, me estoy levantando para caer una vez más.
Porque voy de loco por la vida, pero voy como quiero ir, no como quieren que vaya o como les conviene más.
Y daría lo que fuera por retener esta luz de esperanza, por aferrarme a este sueño que parece tan real, por aferrarme y vivir allí por siempre.
Pero creo que hay una última cosa que debo hacer, algo que me cuesta decir muchas veces, tal vez porque la guardo para oportunidades especiales. 
Quiero agradecer a todas esas personas que han sido capaz de vencer la muerte y dejar una huella en mi vida, esos humanos que fueron capaces de ver más allá y de dar un poco más, que afectaron mi manera de ver la realidad y que ahora son los culpables de mi locura.
Porque lo hicieron sin pedir nada a cambio, porque siempre esperan lo mejor y porque siento que ahora soy lo que soy, gracias a ellos.
Y ellos saben quienes son, tal vez dijeron una frase nada más, pero con eso me bastó para admirarlos y pensar en ser algún día como ellos. 
¿Para qué nombrar? 
Dentro de todo los conozco, y sé que después van a empezar a comparar, que quién estuvo primero, y qué quién está al final.

Gracias por ser como son, humanos y perfectos, con sus defectos y virtudes.
Así aparecieron en mi vida, y así se van a quedar por siempre.

Esta noche es especial, y me la regalaré, a mí y atodos los que me quieran acompañar.
Bebamos un poco y juguemos a que nada va a pasar, que siempre todo seguirá igual.
Juguemos a ser lo que siempre quisimos ser, es sólo una noche, nada más.






lunes, 26 de enero de 2009

Te quiero...



Yo te quiero, no recuerdo si te lo he dicho lo suficiente, o si realmente lo he dicho, o si me has escuchado. Pero, a fin de cuentas lo único importa dentro de este párrafo es que te quiero.
Sí, te quiero.
Te quiero tal y como eres, así de perfecta.
Te quiero de frente y dándome la espalda.
Te quiero incluso si me clavas una espada.
Te quiero de pies a cabeza.
Te quiero con un vestido de novia.
Te quiero completamente desnuda.
Te quiero con una sonrisa en la cara.
Te quiero con una lágrima que en silencio se te escapaba.
Te quiero bailando pegada a mi cuerpo.
Te quiero mirándome de lejos.
Te quiero indiferente.
Te quiero apasionada.
Te quiero con sencillez.
Te quiero maquillada.
Te quiero despertando junto a mí por la mañana.
Te quiero para siempre.
Te quiero como el mejor recuerdo de mi vida.
Te quiero como un idiota.
Te quiero como nunca he querido a nadie jamás.
Te quiero cuando ríes con mis estupideces.
Te quiero cuando me miras a los ojos y no dices nada.
Te quiero cuando olvidas todo y te conviertes solamente en pasión.
Te quiero cuando juegas a ser recatada.
Te quiero con esa madurez impresionante que tienes.
Te quiero y gracias por soportarme.
Te quiero con el pelo al viento.
Te quiero despeinada y sin arreglar.
Te quiero sanando mis heridas y yo las tuyas, esas heridas que deja la vida.
Te quiero con sinceridad.
Te quiero como la madre de mis hijos.
Te quiero ver a los 80 años y despertarte con el desayuno a la cama.
Te quiero abrazar y llorar a tu lado.
Te quiero llevar a la luna.
Te quiero alejar de todo tipo de daño y que nunca te pase nada.
Te quiero como te soñé anoche.
Te quiero como te he anhelado toda la vida.
Te quiero como quieras ser.
Te quiero hagas lo que hagas.
Te quiero feliz.
Te quiero acompañar cuando hagas tus sueños realidad.
Te quiero tomar la mano e ir contigo al fin del mundo.
Te quiero iluminándome las noches frías.
Te quiero como la única que conoce todos mis miedos.
Te quiero haciéndome el amor como si fuese la última vez.
Te quiero extrañar.
Te quiero siendo mi superhéroe.
Te quiero convirtiéndote en la musa de todas mis catarsis.
Te quiero llena de vida.
Te quiero indefinida.
Te quiero con las luces encendidas.
Te quiero sentir cuando caiga la noche en nuestra habitación.
Te quiero y adoro oir tu nombre.
Te quiero frenando el tiempo con un beso.
Te quiero con ese magnetismo inexplicable que hay entre nuestros corazones.
Te quiero amarillo.
Te quiero entiéndome a la perfección.
Te quiero leyendo entre líneas.
Te quiero susurrándome tus sueños al oído.
Te quiero, y quiero lo que quieres.
Te quiero caminando al otro lado de la calle.
Te quiero contándome todas tus anécdotas.
Te quiero escuchándome con atención mis tonterías.
Te quiero enigmática y misteriosa.
Te quiero pervetida y sensual.
Te quiero con tu lengua dentro de mi boca.
Te quiero sudando después de un orgasmo, recostada sobre mi pecho.
Te quiero quemando cada célula de mi cuerpo.
Te quiero cada segundo más.
Te quiero y lo voy a gritar una vez más.
Te quiero y no pienso dejar de hacerlo jamás.
Te quiero.
Te quiero, así de simple. 

...Todo lo demás, cariño, está de más.



Núcleo..


"Ambos corazones latían nerviosos, limpios y con fuerza. Pocos sonidos eran los que viajaban por el aire esa noche, el silencio amenazaba con ganar la batalla y darle un toque especial a ese momento. Ambos estaban al borde de un rascacielos, apunto de caer. Se tomaron de las manos y saltaron al vacio mientras se sonreían."

Desde ese momento hasta ahora, el tiempo ha ido golpeando lentamente sus vidas, casi de manera imperceptible. Crecieron, vivieron, lloraron y rieron. Maduraron y aprendieron juntos. El tiempo los golpeaba más y más.

Las cosas han cambiado un poco, el color de la madera y la temperatura ambiental. La cantidad de hojas de los árboles ya no es la misma, y tampoco sobrevivió el número de estrellas en el cielo, de todos modos ambos sabían que nada se podía hacer.
Todo sucedió de manera natural, sin necesidad de forzar nada, se podía decir todo era perfecto.
Cambiaron muchas cosas, pero nunca se apagó el brillo en su mirada, tampoco cambió la manera en que el viento movía su pelo, ni desapareció ese nudo en el estómago cuando se besaban.
Cambió el color de la madera, se humedeció y un par de amantes le dibujaron un tatuaje sin querer, pero la madera seguía siendo la misma.
Habían crecido, madurado y aprendido, pero no habían cambiado, seguían siendo igual de inmaduros y nerviosos. Es casi mágico, algo que pocos pueden entender, tal vez solamente una mente sea capaz de interpretar la real esencia de todas estas letras.
Y cuando se descifre el real contenido de todas estas líneas, sonreirán los ojos indicados y se abrazará la memoria de una noche de luna llena.

¡Qué difícil es asesinar un beso que ha nacido para no morir jamás!
¡Qué hermosura existe en el momento más común!

Y ya no caminan igual, tampoco hablan de la misma manera ni gastan el tiempo en la misma actividad, pero se siguen riendo con las mismas cosas y siguen haciendo el amor con la misma pasión.
Sólo ellos se entienden bien, probablemente demasiado bien, no hay dudas ni temores absurdos, solamente existe una línea de tiempo que los corta en la misma curva y los lleva a pasear para siempre.
El núcleo sigue igual, así se aprendieron a querer y así que querrán por un par de segundos más.
¿Cuánto dura un segundo?
Ellos dicen que dura una eternidad.

lunes, 5 de enero de 2009

Contacto..


Él y ella son solamente dos, nada más que dos. ¿Importa realmente el ruido que hay alrededor?
Su mundo no gira, se detuvo en una mirada, en una caricia, en un silencio. Su mundo es de ellos, son solamente dos.
Ninguno de los dos necesita razones, su mundo está hecho para dos. 
¿Cómo explicar la magia que existe en ese lugar?

Ella sonríe, y él le toma lentamente la mano. Ella lo mira a los ojos, él sonríe. Ella es cómplice, él también. Ella se sonroja un poco, él piensa que cuando ella se sonroja se ve más linda aún. Ella baja los ojos un poco avergonzada, él le acaricia la mejilla. Ella le mira a los ojos y no puede expresar la tranquilidad que siente, él acerca un poco su cara a la de ella. Ella acerca su cara a la de él, y él abre un poco la boca. Ella abre un poco su boca y cierra lentamente sus ojos, él cierra sus ojos y junta sus labios con los de ella. Ella siente el contacto de las bocas y una brisa de felicidad de recorre el cuerpo, él siente el calor de la boca de ella y piensa en que nunca la dejará.
Ella le toma la mano un poco más fuerte a él, mientras él junta su lengua con la de ella. 
Ella une su lengua a la de él, y él las hace danzar en medio de un mar de saliva y pasión.
Ella cierra la boca de a poco, y él abre los ojos lentamente. Ella junta sus labios con los de él por una última vez, mientras él corresponde con una sonrisa imposible de evitar.
Todo es tan simple, todo es tan natural.

Ella y él son solamente dos. Su mundo es como ellos desean que sea, ella y él son culpables de vivir un sueño juntos.
¿Cómo llegaron hasta acá? ¿Cuál es ese punto exacto en donde comenzó todo esta armonía?
Ella y él son amigos, novios y dos. Ella y él se han grabado a caricias en la vida del otro, sin quererlo y con sencillez.
Ella y él tienen confianza, se conocen al derecho y al revés. ¿Qué importa lo que piense usted?
Ella y él se quieren, y eso lo puede ver. 
Ella y él están locos, completamente locos. Son la mezcla perfecta para un momento lleno de amor.
Ella y él son distintos, pero se aceptan con todas sus manías y sus obsesiones. Cada uno por separado es especial, podrás imaginar el resultado de la unión entre ellos dos.
Ella y él miran juntos hacia atrás, luego se abrazan y se hechan a correr hacia adelante.
Ella y él no tienen miedo. Si existe un error, son dos para buscar una solución.

Ella y él viven en un mundo para dos. ¿Para qué quieren ellos un mundo más grande, si son solamente dos? 
Ella y él se susurran los miedos al oído, se potencian para juntos crecer. 
Ríen con cosas bobas y son los reyes de la irracionalidad.
Ella y él, son perfectamente compatibles, no hay existe nada que los pueda separar.


Ella y él son dos, solamente dos.
Y dos es el número que se necesita para amar de verdad.