
No recuerdo si escribí esto antes, pero quiero comenzar dibujando un poco más lento estas líneas. ¿Por qué?, porque para cuando acabes de leer ya no estaré junto a ti, si no que dentro tuyo.
¿Te asusta idea?, a mí también, no sé que mierda hay dentro tuyo, más allá de un poco de sangre, musculatura y un equilibrio mal logrado.
Ahora que lo veo bien, es casi estúpido pensarlo o intentar reprimirlo, si es que pensaste hacerlo, porque gracias a alguna extraña fuerza sigues leyendo sin parar.
Le llamarás “Dios”, “Suerte”, “Azar”, “Destino”, “Voluntad”, o en los casos más insignificantes “Curiosidad”.
Piénsalo un momento. ¿Acaso no son lo mismo?, o ¿es que mi cabeza es la que ha dejado de funcionar y cree que Dios es producto del azar y de un poco de curiosidad?
Te lo advierto de antemano, ya es muy tarde para parar.
Quizá pensaste que caminabas conmigo apoyándome y dando ayuda cuando lo necesité, pero déjame decirte que no es así.
Yo camino a través tuyo, y tú a través mío.
¿No ves que ya es demasiado tarde para parar?
Ahora si te preguntas dónde caminamos nosotros dos, te confesaré que no lo hacemos, solamente estamos sentados en una banca, temblando y no de frío.
¿Por qué será entonces que temblamos?
Probablemente pienses que estoy loco, o decidirás culpar a mi inmadurez por este arranque de sinceridad, pero vomitar de vez en cuando un par de verdades hace bien, o eso me dijo un mitómano mientras me juraba que decía la verdad.
Me da risa ahora, pero creerle ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida.
¿A qué le tengo miedo?, a que no me odies lo suficientes cuando termines de leer estas líneas.
Durante los últimos años he estado pensando que no lo intento lo suficiente y tal vez por eso no me odies luego de que leas las líneas que vienen acontinuación.
Y la fuerza extraña sigue haciendo su efecto, no has parado de leer ¿verdad?
Fallar es animal, bajo ningún punto de vista es humano, porque el término humano es demasiado grande para nosotros, un par de animales que creen pensar. Y lo más desalentador es que, tal vez nunca seamos humanos.
Algunos no quieren aceptar esta realidad y corren a los brazos de su padre celestial a llorarle misericordia y a pedirle que les lea nuevamente esas páginas de su libro en donde les dice que son la creación más hermosa y perfecta, a pesar de que es capaz de asesinar a toda su familia por dinero o causar las más horribles guerras sin importar las muertes que habrán.
Otros sencillamente se matan y otros pocos se miran los pies, mientras se ríen de esta nueva realidad.
Lo que haga yo no tiene nada que ver con misericordia, o una soga, o risa. Yo simplemente me pongo un par de audífonos y me voy a tomar un café.
Me siento en la barra y veo los autos pasar. No sé si sentirme bien o mal, así que finalmente decidiré no sentir.
Porque el final es en donde se comienza, porque no puedes empezar por otra parte que no sea por el final. Filosofía disfrazada de literatura, música que nadie puede escuchar.
No somos tan distintos, yo vivo dentro de un papel y tú sobre una esfera.
¿O estás tú en una hoja y yo sobre una esfera?
¿Por qué no puede haber escrito antes otro hombre sobre un planeta y una vida como la nuestra?
¿Cómo estás tan seguro de que ahora no hay nadie escribiendo en su pieza, hoja por hoja tu vida? ¡Qué triste para él, que tú le des todo el crédito a un ser que no has visto jamás! ¿Y si es más inteligente que tú y también escribió esa parte de que el crédito se lo das a una figura divina?
¿Y sí están escribiendo mi final en estos momentos?
Ya nada puedo hacer, no puedo hacer nada que no esté escrito ya.
Nada ocurre por casualidad.
Dentro de todo me entretiene mirar a mi alrededor y ver todos los objetos de mi habitación flotar frente a mí, un televisor apagado, una cruz, un par de zapatillas sucias, unas fotografías, unos planetas que todavía no he descubierto, un par de colores nuevos, un dos de corazones, la honestidad de un político, el voto de pobreza de un sacerdote, el don de un actor pornográfico y una caja de pastillas vacía.
¿Dónde estarán las pastillas?, por más que las busco no las veo flotando junto a mi razón.
Locura crónica y una mal dormir.
Hace media hora que apagué la luz de mi memoria y todavía no aparece el futuro frente en su majestuoso esplendor. ¿Será que no tengo futuro?
La silla se sostiene en una sola pata y no tengo ganas de gritar.
Van desapareciendo los recuerdos, se esconde la verdad. Es asqueroso sentir cómo se va perdiendo la identidad, la herida en mis ojos no deja de sangrar.
El dinero ya no cubre este vacío, me mintió la sociedad, dijo que el dinero hacía feliz, pero ya nada es igual.
Autismo acompañado, la honestidad de la campaña presidencial, lucha política, guerra mundial, felicidad concentrada en una Mastercard, sana sociedad, Eva y adán, Caín y Abel.
Quizá la historia no es como la cuentan, quizá Neruda no existió y tal vez 7 por 9 no da 63.
¿Has buscado la verdad en el sitio correcto?
Lo que menos me asusta en estos momentos es la soledad. Nací por este segundo, viví por este segundo y moriré en este segundo.
No podría ser de otra manera, así es hermoso y perfecto.
Idealizando un mar y un sol, pensando en un lugar mejor. No poseo más que este instante que ya pasó.
Aquí es cuando mi alma muere y me convierto en humano, en parte de la sociedad.
¡Qué maravillosa es ésta felicidad!
¡Qué nirvana más intenso estoy viviendo!
¡Qué orgasmo más placentero me hace vibrar!
Ahora estoy dentro tuyo, y tú dentro de mí.
¿Me vienes a buscar?, ¿O voy yo a buscarte, animal?
1 comentario:
Pablo extremada e intensamente filosófico tu post. Si alguien tiene miles de dudas tu lo que has hecho es ponerle semáforos para que entre dentro de si mismo y busque respuesta, así lo veo yo aunque quizás no tenga nada que ver con la idea que te llevó a escribir esto.
Te dejo abrazos =) y un megabeso
Publicar un comentario